Qué son las feromonas y para qué sirven
Qué son las feromonas y para qué sirven
Cuando nos sentimos atraídos por una persona, cuando pasamos por su lado, cuando nos acercamos a hablarle, o cuando besamos su cuello, sucede de forma inconsciente un proceso protagonizado por las feromonas. ¿Algunas vez has sentido un deseo irresistible hacia alguien que no has podido explicar? Esto sucede porque las feromonas son captadas por un órgano que se encuentra en nuestra nariz y que transmite unas señales al cerebro a través del olfato. De esta forma, podemos decir que las feromonas están vinculadas a la atracción entre miembros de una misma especie. .
El poder de la atracción
¿Qué son las feromonas? Las feromonas son sustancias químicas producidas por las glándulas exocrinas activando ciertas reacciones del cuerpo. Estas sustancias son captadas de forma inconsciente a través del olfato y son enviadas al hipotálamo, conocido también como séptimo sentido. El hipotálamo es una glándula hormonal muy pequeña localizada en el centro del cerebro, la cual se ocupa de regular las glándulas y distintas funciones del organismo, como los ciclos de sueño, la temperatura, el hambre y el comportamiento sexual, entre otros. Cuando el hipotálamo recibe la señal enviada por las feromonas, este responde a través del sistema nervioso autónomo y el sistema endocrino. En el caso de las feromonas, el hipotálamo responde provocando excitación, y posteriormente, esta glándula se encarga de devolver al organismo a la normalidad.
Una forma sencilla de entender las feromonas es pensando en la reproducción de los animales. Estos producen feromonas siempre, pero en el período de reproducción, la hembra incrementa la producción de estas sustancias con el fin de atraer al macho. En algunos animales, las feromonas tienen una mayor influencia porque estos tienen la capacidad olfativa muy desarrollada. Sin embargo, los humanos no disponemos de un gran olfato, por lo que no somos capaces de percibir las hormonas a grandes distancias, pero en distancias cortas nuestro cerebro capta estas sustancias y responde generando atracción sexual.
¿Cómo actúan las feromonas?
Las feromonas humanas tienen una función similar a la de los animales, pero a un nivel más bajo. En el caso de los humanos, estas sustancias no tienen un olor característico por las que podamos percibirlas, sino que son captadas de forma inconsciente generando respuestas físicas y emocionales. Siguiendo esta línea, algunos científicos relacionaron las feromonas con el alineamiento del período menstrual en las mujeres que viven juntas o incluso la transmisión del miedo. Por ello, no deja de ser una forma de comunicación entre diferentes especies.
Las feromonas son expulsadas en mayor cantidad por algunas partes del cuerpo a través de las glándulas sudoríparas, pero las eliminamos al ducharnos, lo que supone una diferencia más entre animales y humanos; los animales no solo producen una mayor cantidad de hormonas, sino que las retienen por más tiempo, mientras que las personas nos deshacemos de ellos constantemente.
Las feromonas animales se han utilizado en cosméticos para potenciar la fuerza de atracción de las personas que los emplean. Uno de los mejores ejemplos son los perfumes, los cuales intervienen en la capacidad de atracción. Actualmente, se han creado productos con feromonas sintéticas para aumentar el poder de atracción y seducción. Existe diferentes tipos de feromonas, y cada persona puede escoger en función de su orientación sexual. Los hombres que quieran atraer a las mujeres deberán utilizar un producto con feromonas masculinas, mientras que aquellas mujeres que quieran atraer a un hombre deberán utilizar feromonas femeninas. Tamibién hay disponibles feromonas para quienes quieren atraer a personas de su mismo sexo.